Crema Catalana

Un postre muy típico de la región que su propio nombre indica
Hoy volvemos a publicar una receta de postre. Nos encantan los dulces y para esta vez hemos escogido la crema catalana (o también conocida como crema quemada), una recata típica de Cataluña, aunque popular en todo el país. Se suele comer durante todo el año pero la costumbre es comerla en día del padre (San José), el 19 de marzo. Aun siendo una receta muy sencilla, el resultado es delicioso, y como nos gusta decir a nosotros: "En las cosas simples está la grandeza".
INGREDIENTES (4 RACIONES)
- 1L de leche
- 6 yemas de huevo
- 40g de maicena
- 80g de azúcar
- Un trozo de cáscara de limón
- Un trozo de cáscara de naranja
- 1 rama de canela
- 1 rama de vainilla
- Un poco más de azúcar para añadir el final
ELABORACIÓN
1. Abocar en una olla las cáscaras de limón y de naranja, la rama de canela y la rama de vainilla (retirando las pepitas del interior de la rama para reservarlas). Añadimos la leche y calentamos a fuego medio hasta que esté cerca del punto de ebullición (importante no dejar que la leche hierva). Apagamos el fuego y dejamos reposar 1 hora.
2. Pasada la hora, ponemos en un cuenco las yemas de los huevos y añadimos el azúcar mezclando bien hasta que los dos ingredientes se hayan integrado. Una vez esto, añadimos la maicena y mezclamos otra vez.
3. Ahora es momento de retirar de la leche todas las cáscaras, la canela y la rama de vainilla, ya que han tenido tiempo para infusionar y estará fría. Seguidamente abocamos la mezcla de huevos, azúcar y maicena y añadimos las pepitas que habíamos reservado anteriormente. Mientras calentamos de nuevo a fuego medio, lo removemos durante unos minutos sin parar con una cuchara de madera. Al cabo de un rato, se verá que la crema va espesando poco a poco.
4. Cuando hayan pasado unos 5min, cuando la crema esté espesita (crema fina, no muy densa. Si crees que te ha quedado bastante densa, añade un poco más de leche), servimos la crema en cuencos individuales (normalmente de barro) y dejamos enfriar a temperatura ambiente hasta que esté fría.
5. Una vez fría, cubre los cuencos con más azúcar y caramelízalo con un soplete. Si no tienes soplete no te preocupes, puedes dejarlas unos minutos al grill en el horno. (No quedará igual, pero es un truco muy recurrente para aquellos que no disponen de soplete).
6. Para terminar, cuando el azúcar ya está caramelizado, metemos nuestras cremas catalanas caseras en la nevera para dejar que se enfríen por completo.
Os dejo un pequeño consejo: ¡La crema de un día para otro estará más rica! ¡Buen provecho!